viernes, 11 de diciembre de 2015

OEX 2014 DÍA 2


OEX 2014 -DÍA 2


Después de una corta, pero reparadora noche nos despertamos sobre las 04; 45 horas y tras un rico desayuno de Gofres con mermelada, (aunque yo ya estaba midiendo el agua hasta para hacer el café), recogemos el equipo (demasiado lento para mi gusto) y nos ponemos en marcha.

 Lo hacemos en “reserva” dada la escasez de agua. Aún así, el conocimiento de que se había un puesto de reabastecimiento servia como acicate y esperanza…(sobre todo a mí que me levanté con un litro y medio nada mas).

Vamos racionando el agua mientras está no para de disminuir. Aún con todo nos vamos acercando al punto de destino aún sin tener claro en ningún momento donde nos encontramos debido a la “supuesta” falta de precisión del GPS (y más que probable falta de conocimiento sobre su uso).

Esto provoca varios desacuerdos (inevitables en situaciones límite), pero se tira de mayoría para elegir la ruta y se sigue avanzando.  A veces nos resulta frustrante ya que creemos que vamos por un camino del mapa cuando de repente llegamos a un cruce que no aparece en el mapa o viceversa. Esto te hace dudar de tu capacidad pero no puedes permitírtelo. Entre todos se decide y seguimos adelante.

Llegamos a un punto en el que no sabemos en qué camino estamos ya que según el GPS nos encontramos a sólo 400m del destino  que se encuentra…justo detrás de una montaña.  Debería haber un camino que nos llevara a él directamente, pero frente a nosotros sólo tenemos un camino que nos aleja cada vez mas,


A estas alturas hemos aprendido a no hacer el burro así que decidimos dar la vuelta a la montaña intentado mantener la misma cota de altura en lugar de escalar y volver a bajar…y mierda para nosotros. El camino que elegimos nos aleja 1 km y baja demasiado lo cual jode la rodilla de Wako.

















Las paradas para consultar nuestra posición eran constantes...y en ocasiones frustrantes.

En un lateral del camino encontramos un caminito que, en teoría, nos debe llevar al punto (aunque no viene recogido en el mapa). Lo cogemos y comienza a estrecharse hasta desaparecer  y desembocar en un cortafuego de pura roca. Ya puestos, y sabiendo que somos como somos, decidimos escalarlo…y digo bien, escalarlo, no andarlo. Ya que durante un buen trecho tuvimos que usar las cuatro extremidades.

Ahora, después de que todo terminara, debo señalar, éste fue el único momento de la partida en que tuve verdadero miedo, ya que si alguno se hubiera resbalado y caído era imposible que pudiera haber salido bien parado y, dada la ubicación dónde estábamos, tampoco la evacuación hubiera sido fácil.  Esto, unido al hecho de que mis “Simpáticos” compañeros de equipo me habían designado jefe de equipo y que por ello era responsable de su seguridad, hizo que ésta fuera la única parte de la partida en la que dejé de disfrutar para pasar a preocuparme.

El hecho es que los Dioses favorecen a los locos, y tras varias (y digo varias) paradas más y otros tantos vistazos fugaces a la posible caída, llegamos extenuados a lo alto y a un camino que no aparece en el mapa pero que creemos va en dirección correcta.





. La foto que eligió todo el mundo como resumen de la partida:
Después de llegar a la cima del cortafuegos, extenuados, y tras discutir por la posición una vez más.

Durante la parada comprobamos que hemos salvado bastante más de  200 metros de desnivel…y no quiero saber la inclinación ya que parecía casi vertical.

A todo esto debo decir que a mi me quedaba ya sólo el culo de la cantimplora  y eso que había estado racionando el agua al máximo, usándola sólo para humedecer la boca cuando no podía respirar bien. De hecho Wako me hizo notar que llevaba horas sin orinar, y que la última vez que lo había hecho la orina era muy oscura…(mala señal…aunque él al menos tenía líquido para desechar jeje).

Tras un nuevo susto con un coche de la organización (están hasta en el culo del mundo), proseguimos el camino, para tener otro susto con una patrulla. Al ver como ambos grupos nos tiramos a un lado del camino, nos imaginamos que se trata de jugadores y no de la temida organización. Cuando nos acercamos, comprobamos con alegría que se trata del grupo de nuestro amigo Durruti que vienen de vuelta del segundo punto (Así se hace) y que nos dan una alegría aún mayor, al informarnos que si nos damos prisa, aún pillaremos algo de agua para repostar. No hace falta decir que, a pesar del cansancio y deshidratación nos pusimos de nuevo en movimiento, aún más rápido que antes, y es que no hay mayor motivación que el agua cuando se tiene tanta sed.

(A estas alturas, los pies ya me molestan bastante,  pero la sed me hace pasarlo por alto).

Unos cientos de metros más adelante, llegamos a las coordenadas dadas y, a la derecha del camino vemos los restos de una antigua casa. Nos dirigimos a ella y, en su interior encontramos…SIIII ¡¡Agua!! Bendita, preciosa y riquísima agua.

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¡¡¡AGUA!!! Maravillosa y preciosa Agua…nunca sabes cuánto la necesitas hasta que te falta.

Decir que nos lanzamos de cabeza a ella es quedarse corto. Nos olvidamos incluso de recoger el sobre con las siguientes instrucciones durante un buen rato. Para que os hagáis una idea, yo bebí casi de un sorbo un litro completo, y en cuanto cogí aire, otro litro más. Después de rellenar las cantimploras y camel bags caí en la cuenta que cada uno había acabado en pocos minutos con una garrafa de 5 litros. Menos mal que aún quedaban muchas para los grupos que venían detrás.


Fijaros en como nos cambió la cara después de beber

Una vez hidratados, y de nuevo con agua en las cantimploras, recogimos el sobre (con dos nuevas coordenadas muy próximas entre si y dos mapas más) y nos pusimos en movimiento.




 Y Otros dos mapas mas

Ahora que ha desaparecido la preocupación por el agua, comienzo a ser consciente de que el dolor de la planta del pie derecho se ha extendido desde hace algunas horas al pie izquierdo lo que me hace ir cojeando de manera alarmante. 

Tras varias horas andando realizamos una parada donde además de para descansar y reponer fuerzas con una comida fría y rápida, aprovecho para comprobar que efectivamente, se me ha reventado una ampolla que ocupa casi la mitad de cada pie…en cada uno de ellos.


Pana me auxilia dejándome dos parches de compeed y nos vamos a buscar el tercer punto. En teoría debemos encontrar a un contacto en una casa y luego ir hasta un segundo punto muy próximo (unos 200 metros) dónde recibir más instrucciones.


Ahora navegamos mejor, y aunque a un ritmo lento debimos llegar antes de tiempo porque tras inspeccionar con cuidado el primer punto (la casa), resulta que no había nadie.

Nos dirigimos hacía el segundo punto situado en los restos de una pequeña casita dónde encontramos una nueva caja con las instrucciones.






































Pero puesto que en principio, debíamos encontrar un contacto para recibir otras instrucciones no nos quedamos tranquilos.

Wako y Pana se dedican a buscar al contacto por los alrededores mientras Huargo se queda vigilando la caja con las instrucciones ... y a mi, que apenas puedo dar un paso más debido a mis pies. 

(Es curioso pero el mayor dolor se produce cuando comienzo a andar después de una parada. Por eso intento evitar las paradas y ando hasta que los pies me dicen basta. De esta manera voy alternando el dolor de los pies al caminar un rato, con el dolor de los pies al comenzar a caminar…¡¡¡Y pensar que pago por esto!!!).

Perdemos un tiempo valioso buscando indicios del contacto sin logarlo así que cuando observamos a un grupo de jugadores que se acercan, recogemos las instrucciones del segundo punto con la supuesta información de la localización de un VIP…y nos damos cuenta de que ¡somos los terceros en pasar por allí! No nos lo podíamos creer. A pesar de ser el grupo de los Cascados (nuestra edad media rondaría los 40 años si no fuera por Huargo, eso sin contar que  Wako apretaba los dientes cada vez que bajábamos una cuesta debido a su rodilla, Huargo cargaba con todo el peso del equipo en una mochila escolar, Yo tenía las plantas de los pies en carne viva y Pana…bueno, iba el primero como si nada… el muy mamón).



No todo iba a ser sufrir…Alguna alegría debíamos tener.



Y como no, los dos payasos del grupo siempre dispuestos…


La incertidumbre de no saber nada de nuestros compañeros nos tenía preocupados, pero el error de no tener más de una batería de reserva para el móvil nos impedía llamarles por teléfono y preguntarles. Cabe señalar que el teléfono era la única vía de conexión con la organización ya que la radio casi se reducía  a una ridícula señal de ruido muy distorsionado.

Encontramos una senda que nos llevaban por buen camino y la tarde ya empieza a ir robándonos tiempo y luz natural para ver. Nos toca comenzar a bajar todo lo que hemos subido y aunque Wako seguía con su rostro inescrutable (por algo es “stoneface”) al verlo caminar no hacían falta palabras. Me hubiera preocupado más por él si no fuera porque se partía de risa cada vez que me veía comenzar andar… (Vale, reconozco que eso era lo más duro y que durante unos minutos andaba como un pato mareado…pero ¡joder como me dolían los pies!)

Llegamos a un punto donde el camino muere. Comprobamos el GPS y resulta que el punto de destino se encuentra a unos escasos 700 metros en línea recta, pero una bajada inevitable y posteriormente una loma infranqueable se interpone entre nosotros.

Toca parar y pensar rápido, apenas nos queda  1 hora o menos para el ocaso.

Mientras pensamos una ruta alternativa, Pana, el único con energía de sobra (algún día tengo que preguntarle qué eran esas pastillas que se tomaba en las comidas), entra en juego, os dejo que sea él mismo quien lo explica:

- Panaderator: - Para no exponer al resto del equipo decido soltar mi mochila y bajar a ver si el sitio era practicable porque muy cerca de allí había otro muro y este era de vegetación, tuve suerte y encontré la vía, subo y se lo comento al resto, tomando la decisión de avanzar al punto. Decisión acertadísima porque era el punto donde descenderíamos en rappel y embarcaríamos a la siguiente misión.

Gracias a la exploración de Pana nos hallamos de nuevo en camino hacía el punto marcado. Para llegar a él, hay que seguir una carretera ya que no encontramos otra vía alternativa.  No nos gusta la idea, y aún menos cuando el lateral derecho es  la ladera de la montaña y el izquierdo el río, por lo que no hay dónde esconderse en caso de que aparezca la organización.

Justo antes de llegar al punto que se encuentra al final de la carretera, aparece un coche y de nuevo nos toca tirarnos al arcen. Como os he dicho, el lateral derecho de la carretera era una ladera de roca sin lugar donde ocultarse, así que nos lanzamos a escasa vegetación del arcén izquierdo que bordea el río que se encuentra abajo…con la suerte que detrás del arbusto del que me tiro….no hay nada salvo un pequeño trozo de tierra y …una caída hasta el río.
Huargo me agarra cuando tengo medio cuerpo colgando y me sostiene hasta que el resto llega y logra alzarme. A estas alturas no cabe la menor duda de que soy un genio eligiendo dónde tirarme a esconderme….

Al llegar al punto (que resulta ser un puente) vemos que ahí un grupo de jugadores en él, por lo que la organización nos ordena escondernos y esperar a que el puente quede despejado. Nos explican que no saben cuando tardarán y que el terreno cercano al puente sigue siendo zona de juego por lo que no estamos a salvo de las patrullas.
Nos escondemos y, como no sabemos en que momento nos pueden llamar permanecemos alerta. Según  pasa el tiempo les digo a los míos que procuren descansar mientras yo quedo atento a si nos avisan.


Al final nos tocó esperar cinco horas antes de que nos llamaran, que aprovechamos para descansar algo, comer y contar algún chiste. Tenemos el lago a menos de 3 metros y ya se ha hecho de noche por lo que la humead y el frió comienzan a calarnos por lo que acabamos todos encogidos…salvo pana que aprovechó para probar su NV.


Por fin nos informan que podemos bajar al puente que es “zona segura” y nos disponemos para el rappel.

Una vez en el puente…nos informan que se ha producido otro problema con la lancha y nos toca esperar dos horas más. Al menos, durante ese tiempo tuvimos la suerte de presenciar dos cosas:

-1ª- De conocer a RUSSO. Un ex fuerzas especiales portugués, completamente encantador y con unos conocimientos tácticos con los que sólo podemos soñar. Estuvimos hablando con él largo y tendido y debo decir que disfrutamos cada momento. (Desde aquí un saludo).

-2ª- Y aún más impactante…¡Ver a Wako nervioso!
Vale que íbamos a hacer rappel de noche... a una zodiac…sin llegar a ver el final de la cuerda siquiera…y con un monitor (Russo) aún más loco que nosotros. Pero verlo paseando a lo largo del puerto mirando hacía abajo meneando la cabeza mientras murmuraba “yo no lo veo claro”…mereció todo lo soportado hasta entonces con creces.
(Debo decir que he estado con él en situaciones bastante peliagudas y que nunca lo había visto ni mover una ceja, bueno, ni yo ni nadie que yo conozca, por lo que aquello fue aún fue más llamativo.)

Después de dos horas esperando y temblando de frío…( y disimulando el dolor de mis pies ya que el médico de la organización no paraba de mirarme y preguntarme si me encontraba bien). Recibimos un curso acelerado de cómo hacer un arnés con la cuerda de escalada que portábamos y pasamos al rappel.

Pana, que a estas alturas ya es el perro guía de pleno derecho, baja el primero para recoger las mochilas y las armas. Luego Huargo y luego Wako quien comete el error de reconocer a Russo que es la primera vez que hace rappel… a lo que Russo me mira, me guiña un ojo y espera a que esté completamente colgando de la cuerda para gritarle ¡Tranquilo, también es mi primera vez! Ni que decir cabe que nos estuvimos riendo hasta que llego al final de la cuerda.
Por último bajo yo, no sin que antes Russo me guiñe de nuevo un ojo y me diga que a partir de ahora se ocupará otro monitor del rappel ya que él,  se va a “cazarnos” con su rifle de francotirador….porque “le hemos caído bien”. (No quiero ni imaginar si le hubiéramos caído mal).


No hicimos fotos en el puente ya que era de noche, así que os pongo un par de las que colgó el GOFE en su Facebook:

El de la Boina Roja es Russo, ajustando el arnés a un jugador.

El puente y la zodiac de día. (De noche no se vía apenas nada, y parecía que te enguillia la oscuridad)

Russo demostrando cómo hacer rappel

Y como era demasiado sencillo para él...pues ahora hacíendolo invertido...

Nada más poner un pie en la zodiac y desengancharme del arnés la ponen en movimiento haciéndome casi caer. Apenas hay sitio ya que el centro de la barca se halla ocupado por nuestras mochilas, así que nos situamos encima de los flotadores de la zodiac. Apenas puedo sujetarme a una de las cuerdas que están en el borde y, mucho menos, ponerme algo para cortar el aire que, a esas horas, es frío de cojones.

Aún así, estaba en una zodiac, en mitad de la OEX, iluminados únicamente por una incipiente luna, y en compañía de buenos amigos. ¿Qué más iba a pedir?

Me encontraba pensando en ello cuando escucho un grito de Pana llamándome. Me giro y le veo inclinarse un poco para gritarme ¡Marauder! Call of duty??? ¡¡¡Una mierda para el Call of duty!!!
No puedo evitar más que reírme ya que estoy totalmente de acuerdo.
Pana animado por mi risa se gira al piloto y le grita “Mariquita, lentorro, dale caña a esto, hombre!.
Temo que le siente mal al piloto pero lejos de eso, se limita a enarcar una ceja, hacerle una señal a la marinera que iba delante la cual se da la vuelta y se agarra fuerte al bote,  y llevar el mando del acelerador totalmente hacia delante.

La zodiac se levanta de inmediato y comienza a ir en zigzag a una velocidad enorme. Yo me concentro en sujetarme todo lo que puedo. Vamos tan rápido y giramos tanto que hay un momento en que rozo el agua con la oreja. Reconozco que iba me hubiera cagado con ganas en la ocurrencia de Pana…si no fuera porque ¡¡¡estaba disfrutando como un niño!!!

Después de dar un par de vueltas por el lago (que si, que me dí cuenta que nos habíamos pasado el punto de destino con tal de que nos divirtiéramos un poco), nos lleva a una pequeña isla y nos entrega un sobre con instrucciones para un equipo que se halla en la isla que no lo había recogido en su lugar.

Desembarcamos y nos volvemos a equipar. Estamos doloridos, mojados y muertos de frío…y sin embargo todos tenemos una sonrisa de oreja a oreja… (será que somos masoquistas).

Andamos a oscuras sin querer encender ni siquiera luces de navegación para no delatarnos y al poco tiempo, llegamos a los restos de un pequeño muro dónde un equipo de jugadores nos da un susto.

Se trata del equipo al que tenemos que entregar el sobre con las instrucciones y así lo hacemos. Nos ponemos a buscar la caja que contiene las nuestras mientras ellos abandonan el lugar.

Nueva caja, nuevos mapas y unas nuevas coordenadas. Cuando vemos los mapas los ojos se nos abren ¡Si casi todo es azul!. Vamos al punto marcado en el mapa donde supuestamente nos recojerán. Se trata de una playa de rocas situada en el otro extremo de la pequeña isla. Llegamos a punto de ver como el anterior equipo abandona la playa remando en una pequeña zodiac así que ya sabemos lo que nos espera.

(Tengo problemas para colgar estos mapas así que cuando lo solvente lo haré)



Como no sabemos cuando tardarán en traernos un nuevo bote y, como ya hemos aprendido tras la larga espera para el rappel, les invito a descansar y a que duerman si pueden. Nos tumbamos en la pedregosa orilla (no hay ni vegetación dónde esconderse), y al poco tiempo, todos estamos muertos de frío.  Estar a pocos metros del agua nos comienza a pasar factura y es aquí y en este momento cuando más frío pasamos en toda la partida. Nos abrigamos con lo que tenemos y hasta tenemos que sacar las tiendas y los sacos para combatir la humedad.

Nos abrigamos, nos ponemos los trajes de intemperie o nos tapamos con lo que tenemos para que el frío y la humedad no nos cale. Durante la espera llegan otros tres grupos que se ponen a la cola y  toman otras posiciones a la espera de su turno.

Yo termino metiéndome en la tienda de campaña como si fuera un saco vivac. Mientras busco con la mirada la luz que nos indique que la barca se acerca oigo los ronquidos de Pana y observo las figuras inmóviles de mis compañeros que duermen y me pregunto (no sin envidia) ¿cómo demonios lo hacen?. Aprovecho ese espacio de tiempo para recapacitar sobre las decisiones tomadas en lo que va de partida. El hecho de ser Lider en un grupo como el nuestro dónde nadie es más importante que nadie mitiga mucho la responsabilidad, pero no del todo. Me han designado como jefe de grupo y tengo que responder a ello reduciendo el número de errores que hemos cometido.

Mientras pienso en ello y en el camino a seguir a partir de ahora, me sorprende el que la luz de una estrella se se mueve erráticamente y se  ha acercado mucho…y es que me he debido quedar medio dormido. Han pasado Tres horas y nuestra barca ha llegado.



Seguirá en OEX 2014 día 3

POST: La Oex desde otros ojos:

- PANADERATOR: "El segundo día seguíamos un poco locos por acortar camino y nos hicimos "algunos" cortafuegos de mas. Aún así, con el subidón de haber encontrado la primera caja estuvimos muy motivados aparte de tener las pilas cargadas por haber hecho la parada de la noche anterior.
Escasos de agua mantuvimos un buen ritmo y pudimos localizar el punto de reabastecimiento.
Ya tranquilos por tener las reservas llenas encaminos el siguiente objetivo. Localizar un informador para que nos facilitara un objetivo. Hicimos una parada para comer y descansar 30 minutos, luego fuimos a por la misión del informador que no estuvo pero localizamos la caja con la información con la localización de un VIP que teníamos que eliminar. Abandonamos la zona y bajamos por un camino que acabó desapareciendo a escasos 700 metros del punto que teníamos que encontrar. Dado que teníamos a Wako delicado con las rodillas, antes de seguir me aventuré a explorar el terreno ya que era una bajada muy pronunciada por un suelo irregular ysuelto. Comoví que daba a una carretera sin arrisgarse demasiado físicamente, dí el visto bueno y bajamos alcanzando la carretera y llegando al puente donde nos embarcarían en una fuera borda- Cinco horas de espera allí para la barca. 
Nos llegó el momento y pudimos ver algo inusual en un tío que de primeras es serio y aparenta no tener miedo ni al diablo. Nuestro Wako estaba un poco mosca  con lo de bajar en rappel a la barca..pero le hecho huevos y bajó, con alguna que otra coña por parte de Russo cuando se sispuso a ello. Ya en la barca, y con todo el material pudimos disfrutar de una de las experiencias de este evento que será inovidable para mi. La barca en mitad de alquel lago rompiendo el agua que parecía estar como un espejo, reflejando la luz de la luna y la silueta de las montañas que rodeaban aquel sitio...IMPRESIONANTE. 
Llegamos a una zona donde trendríamos que recojer otro sobre con más información. Tocava volver a esperar a embarcar, esta vez en otra barca pero esta vez de remos...."

- WAKO: "Seguimos adelante, rappel y misión nocturna en lancha. El cuerpo pide mas"

Si, se explaya el muchacho si.....




domingo, 27 de septiembre de 2015

PLCE

REVIEW PLCE





En nuestra búsqueda de material para partidas de larga duración, y viendo lo bien que el Smersh (Sistema de trinchas ruso) les había funcionado en la pasada edición de la OEX a dos de nuestros compañeros, Wako (compañero de aventuras ...y búsquedas de material low cost), encontró el sistema de trinchas británico y no paró hasta conseguir sus dos objetivos:

1º Conseguir un conjunto PLCE para hacerse unas pseudo-smersh (léase smersh de pobres).

2º Comerme la cabeza para que yo también me hiciera de uno…

Como había podido comprobar personalmente (viendo a Panaderator saltar alegremente durante la partida mientras el resto cargábamos a duras penas con nuestras mochilas), el smersh conseguía repartir bastante peso en las caderas, aliviando así bastante la espalda.



Con una incipiente hernia discal…y ya algunos años en mi espalda, me uní a mi compañero Wako en el proyecto del pseudo smersh que aquí os presento…a ver cómo resulta todo.

Fase 1º: Comprar el PLCE y una mochila pequeña:

Por supuesto, esto fue la parte más fácil de la historia. Sólo hubo que investigar durante días hasta dar con la mejor oferta de conjuntos PLCE de segunda mano. Debo decir que nos salió muy económico (25€).

Respecto a la mochila. Después de comprobar que las mochilas de airsoft, aunque copien fielmente el diseño de mochilas militares con un gran diseño, pecan de una falta de calidad que, aunque en una (o muchas) partidas de fin de semana cumplan, en una partida exigente no ofrecen la garantía suficiente de llegar al final (la mía rompió al segundo día y llegó a base de remiendos al final). Así que comencé a buscar una mochila de poca capacidad (en torno a los 20-25 litros) pero más dura.

La verdad es que no tuve que buscar mucho, puesto que Aulo, otro compañero de equipo, me mostró todo lo que le cabía en su antigua mochila 24h del E.T. español así que me lancé en su búsqueda, y gracias a otro compañero (Gracias Eri), la conseguí a un estupendo precio de 12€. Así que por 37€ tenía ya el conjunto completo.

Quedaba ahora la fase 2, la personalización… pero antes de esto, aquí os expongo la review del correaje

PLCE: (Load Personal Equipment Carry).

Introducido alrededor de 1988 como sustituto del correaje 58, está fabricado en cordura para que seque rápido y no absorba agua, ya que ese era uno de los principales problemas del correaje 58 fabricado en algodón, así como para tener una mayor modularidad.

Quien quiera tener más información sobre el PLCE puede leerlo En https://es.wikipedia.org/wiki/Equipo_Personal_de_Transporte_de_Carga

El conjunto adquirido se componía de:
- Cinturón.
- Yugo.
- 2 Bolsas porta cargadores.
- 2 Bolsas de usos varios.

Al tratarse de material surplus o de segunda mano, se nota el maltrato sufrido, pero sigue siendo perfectamente funcional (eso sí, después de fregarlos dos veces siguen soltando suciedad).

Como podréis ver en las fotos, hay bolsillos de diferentes fabricantes y medidas, así que si os hacéis con un conjunto como este, saber que puede diferir en detalles.

Empecemos por el cinturón:



Se trata de un cinturón fabricado en nylon bastante rígido, en patrón DPM. Dispone de ranuras en su parte interna/externa para el enganche de los bolsillos, y se engancha mediante una gruesa hebilla de liberación rápida


El Yugo:

 

Realizado en forma de Y, está igualmente realizado en nylon.

Las correas de los hombros están acolchadas. (En las fotos veréis unos D-Rings que he cosido yo para enganchar la mochila al PLCE pero que no vienen originalmente).

El acolchado, aunque de calidad, puede resultar algo insuficiente si llevamos mucho peso en las trinchas.

El panel trasero es tipo malla por lo que transpira bien.

Dispone de 6 correas de fijación al cinturón, lo que supone una ventaja respecto a las 3 o 4 habituales, ya que nos permite repartir mejor el peso. (Resaltar que las correas tienen una longitud enorme, lo cual nos permitirá jugar un poco con ellas como veréis más adelante para intentar repartir aún mejor el peso del equipo).

Bolsas porta cargadores:

- El Kit viene con dos bolsas porta cargadores dobles.
El cierre exterior utilizado es el conocido como “cierre español”, (muy apreciado fuera de nuestro país por no hacer ruido al ser manejado) pero que tiene la desventaja de no ser regulable en extensión.

Aquí vemos los dos sistemas de cierre, por presilla española y por velcro.


En el interior del porta cargador vemos la etiqueta del fabricante.


 
El sistema de velcro está muy bien resuelto ya que posee una lengüeta para taparlo cuando no queramos usarlo que se pliega en el interior sin molestar.

En cada bolsillo caben hasta tres cargadores de M4, (o incluso tres de AUG aunque quedan muy ajustados), y 2 de AK…aunque con éstos hay que forzar mucho la solapa de los bolsillos para cerrarlos dada su mayor longitud.

3 Cargadores de Aug…justos pero caben.


Y además el bolsillo cierra perfectamente.


Sin embargo 3 cargadores de AK apenas caben


..Y ni por asomo el bolsillo cierra. Por lo que sólo podremos guardar de forma efectiva dos de ellos.

Como veis, estamos hablando de una gran capacidad de transporte (3 cargadores por bolsillo x 4 bolsillos en total = 12 Cargadores).

Teniendo en cuenta que la mayoría de partidas a las que vamos están limitadas a un máximo de 400bb … y que nunca nos hemos quedado sin munición, mi idea es llevar tres cargadores en un bolsillo y un cuarto cargador en la réplica, dejando los otros tres bolsillos libres para otras cosas.

Cada porta cargador tiene 2 enganches de metal  para el enganche de las correas de las trinchas, pudiendo elegir entre ellos.

También posee trebillas de tela en cada lateral para enganche de accesorios.

Se coge al cinturón mediante cuatro presillas:

Dos con cierre y dos, más largas, sin cierre.

Bajo estas últimas, disponen de un trozo más de cincha que se suele utilizar para enganchar todos los bolsillos entre sí y así, evitar que boten durante la carrera.

En la parte trasera podemos ver los sistemas de enganche al cinturón.


Bolsas de usos varios:

Estos bolsillos tienen una capacidad mayor. En ellos podemos guardar desde cantimploras, hasta comida, útiles, plato de campaña, etc. Para que os hagáis una idea, en cada uno he guardado una cantimplora de 2 litros (aunque al ser de marcas diferentes, en uno entra con mayor facilidad que en el otro).






Como podéis ver, hasta los mecanismos de cierre son diferentes (cierre español en el de la izquierda y mediante clip en el web-tex)…así como la capacidad de cada uno. Aunque parecen idénticos en el de la izquierda hay que luchar para que la cantimplora entre, mientras que en el web-tex entra y sale fácilmente.

Además también poseen el sistema de cierre por velcro de los porta cargadores.



A cómputo de cabida, podéis ver que en cada bolsillo caben hasta 5 cargadores de AUG 0 6 de M4, lo que daría un total de 10 y 12 cargadores  respectivamente.

¡Hasta caben los cargadores de AK!.

Sin embargo no es esta la función para la que están pensados, para ello ya están los porta cargadores analizados arriba.

Estos bolsillos están destinados a objetos más grandes…como las fantásticas cantimploras de 2 litros que he comprado recientemente.

Estos bolsillos también disponen de dos argollas metálicas para enganchar a las correas, así como de este enganche hembra de clip que no se para que es.


Debo decir que su capacidad es más que suficiente para la mayoría de objetos grandes que solemos llevar en una partida. En ellos caben tanto ponchos, como un polar, comida en abundancia para un día, etc.
También disponen de las mismas 4 presillas para engancharlos al cinturón, con su correspondiente prolongación inferior.

Una vez vistos  sus componentes pasemos a la preparación de los mismos.

Montaje:

Voy a explicar el montaje, digamos “oficial”del PLCE. Esto es, la manera en la que los soldados británicos lo montan. (Más adelante os enseñaré la manera en la que yo lo monto que es bastante diferente aunque para mi, mucho más efectiva).

Lo primero es ajustar el cinturón a vuestras medidas.  Es muy importante que recordéis dos cosas:
1º- Decidir antes de nada si llevaréis o no acolchado debajo del cinturón, ya sea el original o uno improvisado como el mío, ya que de ser así, deberéis parar aquí y no seguir hasta que lo tengáis en casa.

2º- A la hora de tomar la medida de la longitud del cinturón medir vuestras caderas, y no vuestra cintura. Ya que la posición ideal del cinturón son las caderas para que de esa forma, el peso recaiga en ellas.
  

Vamos allá:

Desmontamos una hebilla del cinturón (no hace falta que desmontéis las dos)


Y comenzamos a introducir los bolsillos por ese extremo abierto.

Os recomiendo empezar por el cinturón y con los bolsillos vacíos. Primero poner los bolsillos y una vez tengáis el cinturón puesto comprobar dos cosas:

1º que al andar y correr, o al hacer rodilla en tierra, vuestras piernas no chocan contra los bolsillos delanteros. Si es así, debéis retrasarlos.

2º Una vez comprobado esto, llenar los bolsillos con lo que queráis llevar en ellos y comprobar que podéis acceder a ellos. (No os servirá de nada poner herramientas de uso habitual en un bolsillo al que no podáis acceder).

Como he dicho antes, los bolsillos poseen 4 lengüetas, unas más grandes que las otras.

Abrir las lengüetas de clip y dejarlas abiertas.

Introducir los bolsillos por las presillas grandes…
 …y configurar los bolsillos a vuestro gusto siguiendo las normas expuestas arriba.



Una vez hecho esto, insertar las pestañas de cada bolso en las ranuras del cinturón

Cuesta un poco dada la rigidez del conjunto, pero es cuestión de ponerse. Primero una…


…Y luego la otra.


Luego cerrar las lengüetas pequeñas mediante el clip.

Así cada bolsillo estará sujeto al cinturón mediante dos presillas grandes, dos presillas pequeñas y un clip de metal (vamos, que no se os va a caer ni de coña).

Una vez sujetos los bolsillos es cuestión de volver a asegurarnos de que tomamos bien nuestra medida y cerrar el cinturón. Para ello introducimos las espigas de metal en los agujeros correspondientes (no os preocupéis que cuesta un poco dada la rigidez del conjunto).

Una vez comprobado esto podéis pasar al yugo y correas.

Os explico la forma habitual de poner las correas y luego os explicaré el experimento que estamos haciendo nosotros:

El yugo posee 6 correas, 2 al frente, 2 para la espalda y 2 para los costados.

Las dos correas de la espalda se enganchan a las dos presillas metálicas que tiene el cinturón en la zona posterior

Las dos correas laterales se sujetan a las presillas metálicas externas de las bolsas porta cargadores o a la de usos varios, según la circunferencia y medidas del usuario.

Quedanto tal que así:

Las dos correas delanteras se sujetan a las presillas metálicas opuestas de los porta cargadores.

Esto está diseñado así para aumentar la distribución del peso y la estabilización del conjunto.

Para aumentar esto último, cada bolsillo posee un pequeño lazo de tela.

 Están ahí para pasar una cincha por ellos y unirlos entre si reduciendo de esa forma el rebote típico de los sistemas de trinchas.

Investigando por Internet podéis ver como hay quien usa los lazos externos para dar esa rigidez como podéis ver abajo.



Comodidad:

Así expuesto, sabemos que el sistema debe distribuir bien el peso (o debería hacerlo, ya lo probaremos).

El grueso cinturón aporta mucha rigidez al conjunto pero no ayuda a la comodidad.

Para ello se diseñó un accesorio acolchado que aumentaba mucho la comodidad a la hora de portar el sistema durante horas y que podréis encontrar fácilmente por internet…o haceros vosotros mismos un acolchado interior como yo jeje.





Modularidad:

El sistema aporta la capacidad de adaptarlo a nuestro gusto o medidas, ya que existen muchas tiendas en Internet donde pode adquirir más bolsillos como los expuestos u otros, como porta radios, bolsas de agua, etc.

Si bien el sistema está diseñado para bolsillos PLCE, no es imposible engancharle otros tipos de bolsillos.

Por ejemplo, yo le he probado a poner un bolsillo Molle y lo he podido hacer sin problemas aunque nunca quedará tan fijo y rígido como uno diseñado expresamente para este sistema.

Con esto y poco más tendréis suficiente tanto para formar un equipo ligero de supervivencia:



Como para recrear al ejército de la “pérfida Albión”:

Respecto al Bricolaje y customización del equipo y a las pruebas a las que lo estoy sometiendo, las iré publicando poco a poco dado que el presente artículo ya se está extendiendo demasiado. Así que os espero en el próximo número dónde os podré decir ya qué resultado me está dando.

Una saludo a todos de Marauderxs.

Post: En el momento de publicar este artículo ya he realizado varias salidas con el PLCE que me han despejado varias dudas y, aunque proximamente os iré relatando lo que he averiguado, si os adelanto que el sistema de anclar las correas "estándar" no funciona bien. Sin embargo, un poco de tuneo fácil las pueden convertir en una opción muy, muy buena para marchas muy largas...pero no me voy a adelantar. Ya lo podréis leer dentro de poco.